El texto de Torrego Seijo, nos habla sobre diferentes modelos para solucionar los conflictos que surgen en la escuela y que tanto afectan a la convivencia en el aula.
En mi opinión, el modelo punitivo (acción-castigo), se lleva utilizando desde hace décadas y aún, en estos tiempos que corren siguen existiendo en nuestras aulas. Este modelo puede ser el que más se critique, si queremos solucionar los problemas o conflictos que van surgiendo entre los alumnos dentro de las aulas.
Podemos decir que el modelo punitivo tiene gran cantidad de limitaciones, debido que para obtener una solución inmediata, positiva y a corto plazo, el alumno no obtiene ningún tipo de aprendizaje y por tanto, va a dar lugar a que la conducta del alumno se vuelva a repetir y el problema o conflicto no se extinga, ni se radique.
En mi época de estudiante de primaria, recuerdo que el modelo punitivo era y sigue siendo el más utilizado, por desgracia, el más utilizado por los docentes de mi etapa escolar de educación primaria. La forma de actuar de los docentes, se reducia, cuando habia un conflicto dentro del aula en dar un par de voces, castigarte sin recreo, echarte fuera de clase o lo que es peor, te hacían copiar 100 veces "Me debo portar bien en clase" o "No debo tirar papeles a mis compañeros", algo que a mi parecer no sirve de nada, debido a que volvías a repetir la misma conducta negativa una y otra vez.
Aparte de criricar y estar en contra del modelo punitivo, tengo que hacer una reflexión objetiva y positiva sobre los modelos relacional (acto privado entre las partes implicadas) y el modelo integrado (restituir a la victima en un acto público), que cada vez se va integrando de manera gradual en las aulas y que se basan los dos modelos en el dialogo e intentan erradicar y modificar esas conductas negativas entre los alumnos, tratando los problemas desde la base y consiguiendo que eliminen la conducta negativa o modifiquen la conducta negativa en positiva, eliminando asi todo tipo de conflicto o problema dentro del aula.
De esta manera y como conclusión creo que estos dos modelos, tanto el relacional como el integrado, es la manera o el camino más adecuado para hacer ver al alumno, a que se de cuenta del problema, con una actitud positiva y procurando que aprenda para que no se vuelva a repetir la conducta errónea. También a su vez, dentro del aula podemos integrar el modelo integrado puro, en el que los propios compañeros son los que ayudan y aportan soluciones para erradicar el problema y así poder resolver el conflicto de la mejor manera posible, utilizando siempre el dialogo como herramienta fundamental para la resolución de conflictos.
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